¿Pillaste a tu pareja masturbándose? ¿Te sientes insegura porque no te buscó para satisfacerse? ¡No le des importancia! La masturbación es una parte fundamental de la sexualidad para casi todo el mundo, sin importar si se tiene una relación estable. Es más, un porcentaje importantísimo de las personas casadas siguen masturbándose. ¿Por qué?
No hay razones para sentirse culpable si te dan ganas de autosatisfacerte y no te compliques si tu pareja lo hace. ¡Es normal! Además, estudios han comprobado que aquellos que se masturban habitualmente tienen más y mejor sexo, tienen mayor coordinación durante los encuentros íntimos y están muy claros de los que les gusta y lo que no.
Otra gran ventaja es que disminuyen los niveles de ansiedad, presionan menos a sus compañeros en todo lo relacionado al sexo y suelen ser más complacientes. Está demostrado que las personas que se masturban suelen enfocarse en dar placer, no sólo en recibirlo.
Los hombres buscan masturbarse por diversas razones: para disminuir los niveles de estrés, despejarse de la cotidianidad, conciliar el sueño o porque simplemente tienen ganas y no quieren tener sexo como tal. También lo hacen para aprender a controlar las erecciones y orgasmos.
No hay mentira más grande que aquella que afirma que en una relación perfecta no es necesaria la masturbación, al contrario. De hecho, son comunes las parejas que disfrutan de esa práctica juntos y la convierten en una parte importante de su vida sexual.
¡No hay que sentirse culpable! Rompe tabúes y recuerda que conocernos y disfrutar de nuestro cuerpo es bueno para todos.