Los jóvenes y adolescentes de hace 20 o 30 años no tenían el acceso a la información que tienen ahora. En la actualidad, cuando un joven aborda a sus padres y familiares sobre su orientación sexual ya está bastante claro al respecto, te garantizo que ha pasado muchísimas horas investigando en Internet. Hasta ahí todo me parece bien. Pero, ¿qué sucede con los padres? ¿Qué tan preparados están para recibir la noticia?

Aunque seguramente papá y mamá sospechan de la tendencia sexual de su hijo, por más mente abierta que sean nunca es fácil aceptarlo. Los progenitores suelen experimentar sentimientos de culpa, frustración, tristeza e incluso decepción. Ahora bien, hay que entender una cosa: la homosexualidad no es una enfermedad y mucho menos una aberración. Como tu Sexóloga en Tampa te diré cómo asumir esta realidad.   

¿Quién ayuda a los padres?

Aunque ustedes no lo crean, un porcentaje importante de padres buscan ayuda psicológica para que corrijan o curen a su hijo gay. ¡Esto es terrible! La homosexualidad no es un padecimiento ni se cura con terapia ni con una píldora. Mi deber es orientar a los progenitores en este proceso, quitarles la venda y enseñarlos a aceptar la nueva realidad. En primer lugar, deben comprender que ellos no tienen la culpa de las preferencias sexuales de sus hijos.

Mi deber cómo psicóloga es aclarar que la homosexualidad no es un problema de identidad. Es indispensable reeducar a la sociedad y superar ese paradigma retrógrado y terrible que quiere imponer que la sexualidad sólo es justificada como un acto reproductivo y donde deben estar involucrados un hombre y una mujer.

¿Cómo aceptar a un hijo homosexual?

  • Busca ayuda profesional: si no sabes manejar tus emociones y no tienes idea de cómo comportante ante la realidad, lo más recomendable es que busques ayuda psicológica. El objetivo es que más temprano que tarde trates a tu hijo como lo que es: una persona totalmente normal.
  • Busca grupos de apoyo: no eres el primero ni el último que vive una situación como esta. Te garantizo que en tu ciudad existen grupos de padres, familiares y amigos de la comunidad LGBT que te ayudarán a superar ese primer shock. Cuando hayas aceptado a tu hijo tal y como es, se te abrirá un mundo de posibilidades.
  • Documéntate: existe miles de libros con prestigio que te ayudarán a adaptarte y a comprender, también cientos de foros y páginas web administradas por personas calificadas que siempre están dispuestas a ayudarte.
  • Actúa con naturalidad: ¿por qué no actuar con naturalidad? ¡No ha pasado nada! Lo único que debes exigirle a tu hijo es el respeto a los padres y al hogar, exactamente igual como lo harías con alguien heterosexual.

Tómate tu tiempo pero no esperes demasiado, tus hijos no dejarán de ser tus hijos y requieren de todo tu apoyo y más en una sociedad que, a pesar de todos los avances que se han conseguido, todavía sigue siendo complicada para la comunidad LGBT. ¿Necesitas ayuda? Si no te encuentras en Tampa puedo ser tu Sexóloga Online y pautar sesiones vía Skype.

Espero que tengas un maravilloso día.